En anteriores entradas, analizamos en profundidad la obligatoriedad de disponer de un Plan de Igualdad. Obligación prevista en la Ley Orgánica 3/2007 para empresas de más de 50 trabajadores/as en los procedimientos de contratación que ha suscitado heterogéneas líneas doctrinales en torno al carácter y efectos de su inscripción en REGCON.
Si bien el TACRC parece ahora pacificar definitivamente las divergencias sobre la forma idónea para acreditar la tenencia del Plan ante el órgano de contratación en una reciente resolución.
Dictamen del Tribunal
- La validez del Plan y su aplicación en la empresa no la determina la inscripción en el registro, sino la negociación entre las partes del mismo con los requisitos que establece la LO 3/2007, y que desarrolla el RD 901/2020.
- Sería ilógico y desproporcionado con la finalidad que persiguen la citada Ley Orgánica y la LCSP que, existiendo un plan de igualdad negociado y acordado entre las partes, la empresa pudiera estar incursa en prohibición para contratar por el hecho de no estar inscrito en el registro.
- De hecho, la LO 3/2007, en su versión inicial no contemplaba la creación e inscripción del Plan de Igualdad en un registro específico. Fue el RD-L 6/2019, doce años después, el que vino a crear el registro estableciendo la obligatoriedad de su inscripción.
Conclusión
- La inscripción del Plan, si bien es obligatoria, lo es a los efectos de publicidad, y no tiene carácter constitutivo.
- La acreditación se viene realizando mediante la presentación de la declaración responsable en los términos del artículo 71.1.d) 3ª párrafo LCSP. Aunque está previsto un futuro real decreto que establezca formas alternativas.
- Al haber acreditado la mercantil actora que disponía de un plan de igualdad a raíz del requerimiento efectuado por el OC, ello debería haber llevado a éste a adverar la aptitud de la empresa propuesta. Todo ello de conformidad con el Acuerdo del Pleno de este Tribunal de fecha 5 de abril de 2022.
Imagen por the_graphic_bakery
JESÚS MESA
